La UE ha acordado una metodología unificada para calcular las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de los servicios de transporte. Las nuevas normas tienen por objeto facilitar la comparación del impacto medioambiental de los diferentes modos de transporte, ayudando a los consumidores y a las empresas a tomar decisiones informadas y reduciendo al mismo tiempo los riesgos de «greenwashing».
La metodología da prioridad a los datos primarios frente a las estimaciones y recompensa a los operadores que miden las emisiones directamente. La Comisión Europea desarrollará una herramienta de cálculo pública y gratuita, con manuales de apoyo, que estará lista en un plazo de cuatro años.
Esto sienta una base fundamental para que las emisiones de gases de efecto invernadero sean transparentes y comparables entre los distintos medios de transporte. Reduce la complejidad y garantiza una armonización fluida con los requisitos de sostenibilidad y presentación de informes de las empresas del sector turístico.
En lo que respecta a los viajes aéreos de negocios, sigue sin resolverse la cuestión de si los efectos no relacionados con el CO2 se presentarían como información opcional.
La Comisión, junto con la Agencia Europea de Medio Ambiente, también creará dos bases de datos gratuitas de la UE que contendrán valores de intensidad y factores de emisión de GEI.
Esta iniciativa permitirá tomar decisiones más informadas en materia de transporte y empujará a las empresas hacia una mayor transparencia y precisión en la notificación de emisiones.